Los latinos no tenemos responsabilidad individual.
No hay manera.
No lo hemos desarrollado a lo largo de los siglos y somos esclavos de nuestra herencia cultural.
La sociedad latina nos regala nuestros derechos
Voy a simplificarlo.
El problema está en el concepto de sociedad latina. Una sociedad latina se crea conformando un estado y, después, llenándolo de ciudadanos por debajo. Estos ciudadanos nacen con todos sus derechos por el hecho de ser ciudadanos.
Por otro lado, ¿cómo se conforma una sociedad germánica? Según Ortega y Gasset: “con el vigor de su puño y la amplitud de su espíritu, conquistarán las tierras, someterán a los pueblos y se harán seguir por ellos”. En la sociedad germánica, los derechos se conquistan y renuevan cada día.
Una de romanos… y de protestantes
En Roma, los ciudadanos eran subvencionados por el hecho de serlo –había que meter ciudadanos bajo el estado- y, claro, hubo un momento en el que les salía más a cuenta vivir en la ciudad que en el campo. Naturalmente, la subvención venía en gran parte del campo y si el campo no generaba…Digamos que la financiación del sistema quebró el sistema. ¿os suena?
¿entonces que hacen?
Pues se van a tocar las pelotas a los germánicos que, “con el vigor de su puño y la amplitud de su espíritu” se los pasan por la piedra. Pero como no tienen intención colonizadora, se van y el hueco que había dejado el estado romano, lo ocupa otro estado; la Iglesia.
Con el tiempo, el sistema vuelve a corromperse y aparecen las indulgencias y, entonces, un germánico protesta contra todo esto. La doctrina de Martín Lutero se basa en las cinco solas:
1. Sola Deo Gloria: La gloria es de Dios, no de sus ministros, ni de sus símbolos.
2. Sola Cristus: Este es el único intermediario. No hay subcomités que aprueben los proyectos, ni subsecretarios ni delegados del gobierno…
3. Sola Gratia: El único que tiene la autoridad para perdonar es Dios, y lo hace de forma gratuita. Es decir, si he robado, no vale con dimitir en el parlamento para obtener un perdón intermedio.
4. Sola Scriptura: La Biblia es la que es y no la interpretación que nos hagan de ella. Si quiero saber si una ley es buena o mala, no tengo que leer El Mundo o El País a ver que dicen de ella, tengo que leer la ley.
5. Sola Fide: la salvación se obtiene por tener una fe que transforma al individuo y sus obras. No me basta con tener un discurso sobre la ética, solo vale que yo sea ético y mis hechos así lo expresen.
Ante esta situación, la Iglesia Católica contraataca con el Concilio de Trento que, en lo que he leído, es algo así como “…y arderá en los infiernos aquel que dudare de la interpretación que la Iglesia hace de las Sagradas Escrituras…”
¿quién se acoge a la Contrarreforma?
…
Portugal, España, Italia. Si le sumamos la parte católica de Irlanda, ahí lo tienes. Solo faltan los griegos.
Los latinos estamos educados en eludir permanentemente la responsabilidad individual.
Demostración práctica
No me creeis.
En Inglés: “I dropped my pencil”
En Español: “Se me ha caído el lápiz”. Debe de haber sido un suicidio…
En inglés vas a la peluquería y te preguntan «what are you gonna get done?» –«¿qué vas a hacer que te hagan?»-. En España es «¿qué te van a hacer?», porque la responsabilidad es del peluquero, no tuya.
En inglés es ‘air conditioning’, porque el que condiciona el aire soy yo. En español es ‘aire acondicionado’ porque el aire lo condicionan otros.
“El balón no ha querido entrar” Claro, es que el trozo de cuero, de forma autónoma y ejerciendo sus derechos constitucionales ha decidido no entrar en la portería
“¡Tonta, pared!”. No. Tonto el niño que es el que se ha dado un cabezazo.
Hace unos años, hay un grito que levanta la moral de 350 millones de norteamericanos: “Yes, we can”.
¿cómo se traduce “Yes, we can” al español?
“¡Si, se puede!” –pero que pueda otro, que no es mi responsabilidad-.
No nos engañemos, es un instinto y lo único que podemos hacer es luchar contra él.
La responsabilidad de que la moto corra es mía
Hace tiempo, cuando trabajaba en Movistar, patrocinamos a un piloto brasileño, Álex Barros. Durante la temporada, hacía octavas posiciones, séptimas, sextas. Al año siguiente nos fuimos a Suzuki y Álex se quedó en el mismo equipo, misma moto, mismos mecánicos solo que distinto patrocinador.
Durante la temporada empezó a hacer quintos, cuartos, incluso visitaba con cierta frecuencia el podium.
Un día me crucé con el en el paddock y le pregunté que cómo lo conseguía. No teníamos una relación frecuente, pero las veces que hablé con él era con sustancia. Me llevó a su motorhome y me explicó:
“Estaba entrenando en Assen –o República Checa, no recuerdo– y tenía problemas con la horquilla delantera. Entré en boxes y le dije al equipo que me pusiesen la horquilla como el año anterior”
“Salí, di unas cuantas vueltas y, al entrar en el box, me fijé en el crono que marcaba dos décimas menos”
“Me giré, miré a los mecánicos y les dije: ¿lo veis?”
“Ellos, se callaron, giraron la cabeza de un lado a otro y me dijeron: ‘Álex, te hemos desmontado la horquilla y te la hemos vuelto a montar exactamente igual’”
“Ese día me di cuenta de que, en cinco kilómetros, dos décimas de segundo no pueden ser culpa de la moto y, desde entonces, cuando llego a un Gran Premio, me peleo con lo que no es mi responsabilidad –la moto y los settings- pero cuando llega el entrenamiento oficial y la carrera, la responsabilidad de que la moto corra es solo mía”
Hace muchos años de esto pero la lección sigue viva como el primer día. Primero intenta hacer bien lo que está en tus manos y luego exige a los demás y al mundo.
Me siento infrautilizada
Un día vino una chica de la oficina quejándose:
“-Me siento infrautilizada
-¿te sientes infrautilizada o infravalorada?
-Creo que me siento valorada, pero infrautilizada
-Entonces vamos a hacer una cosa; vamos a dividir la frase en dos. Como para ‘infrautilizada’ necesitas a otros que te utilicen, vamos a dejarlo a un lado y vamos a trabajar con ‘me siento’ porque para arreglarlo solo te necesitas a ti misma”
Se que no es una reflexión amable, pero la realidad pocas veces lo es. A partir de ahora, voy a asumir mi responsabilidad y, en lugar de tratar de cambiar la historia, voy a intentar corregir mi comportamiento
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