Con toda esta histeria que nos ha entrado por no saber cómo actuar en el nuevo entorno de las redes sociales cada vez que se lía una gorda con nuestras marcas en internet, me voy a atrever a elevar a pauta algunas cosillas que he venido observando y que se repiten con cierta frecuencia.
Disclaimer: lo que digo a continuación solo aplica a las polémicas relativas a campañas de imagen de marca. Obviamente, si la polémica es sobre las características del producto, el servicio o las finanzas, el efecto es diferente.
1. Los incendios duran hasta que se inicia otro: 1 día y medio
Si, se que como afecta a tu marca lo vives con mucha intensidad, pero para el consumidor, toda esa polémica le va a hacer gracia hasta que haya otra más interesante. Normalmente, en temas de marketing, dura entre un día y dos días. Ten en cuenta que la nueva polémica no tiene por qué ser sobre otra marca, basta con que le pongan un micrófono en la boca a Piqué o a Willy Toledo.
2. Cuanto más grave sea la cagada que has cometido, más posibilidades de que aparezca una corriente de apoyo
En twitter lo que mola es la polémica y hay algunos que se han confundido lo de ser responsive con llevar la contraria. Es decir, solo esperan a que haya mucha gente de acuerdo en algo para obtener relevancia defendiendo la postura opuesta. En marketing político esto es exagerado, en periodismo deportivo, un modo de vida. Con un poco de suerte, alguien hará el trabajo por tí.
3. Cuando se ha liado parda, la verdad es irrelevante
Si la gente está graciosa metiendole caña a algo ¿qué más da lo que haya pasado?. Lo peor que puedes hacer en medio de una crisis es tratar de dar explicaciones, y menos si tienen cierto grado de complejidad. Tienes que jugar en las reglas dialécticas de internet; si te toman a cachondeo, sé el más cachondo y si te reprochan algo, sobreactúa en las disculpas.
4. Trata de tener un bombero en el lugar del incendio
Si la polémica la vas a provocar tú para obtener relevancia, no se te olvide tener un bombero con un extintor en el lugar donde la vas a iniciar. Con suerte no lo usarás, pero tienes que tenerlo. Por ejemplo, si te vas a meter con el Atleti, implica a algún personaje con más carisma que popularidad como el Mono Burgos o el Profe Ortega para que te apoyen si la cosa se va de las manos.
5. No hacer nada es hacer algo
Si no tienes argumentos o habilidades para manejar la situación, tampoco te agobies mucho. Solo tienes que quedarte quieto y esperar a la próxima polémica. Ten en cuenta que Piqué juega dos veces por semana.
6. Matas un gato y no te llaman mata-gatos
No eres tan importante. Explica en el Comité de Dirección por una cagada nadie va a cambiar su percepción de la marca, otra cosa es que la cagues repetitivamente. Si además tienes ética profesional, diles que tampoco tu último hit va a mejorar por sí solo la intención de compra.
Y ahora relájate, que estás muy tenso
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